Desde que te vi, supe que serías el protagonista de mi historia de amor no correspondido. Te amé con todas mis fuerzas, pero solo fui una víctima más del destino cruel que nos separó. Ahora, en mi corazón solo queda la tristeza de un amor que nunca fue.
Aunque mi corazón te busca en cada rincón, sé que nuestro amor es un callejón sin salida.
Justo cuando pensé que nuestras miradas se encontraban en la misma sintonía, descubrí que para ti solo era una canción de radio que olvidabas al cambiar de estación. Y así aprendí que el amor no correspondido duele más cuando lo intentas bailar en solitario.
Me perdí en un mar de ilusiones, nadando en un amor que nunca fue correspondido. Mis lágrimas se mezclaron con cada palabra no dicha, recordándome que el amor también puede ser un callejón sin salida.
Aunque mis sentimientos se desborden en un mar de amor hacia ti, me duele aceptar que en tu corazón no hay siquiera una gota para mí.
Aunque mi corazón late por ti, sé que el tuyo jamás podrá sentir lo mismo. No hay mayor tristeza que amar a alguien que no puede amarte de vuelta, pero al menos me consuela saber que te di lo mejor de mí, aunque solo sea en silencio.
Me entregué al amor sin medida, pero sus ojos solo vieron en mí un reflejo difuminado. Ahora mi corazón naufraga entre susurros rotos y promesas que nunca serán cumplidas. ¿Por qué el amor no correspondido tiene que doler tanto?
No puedo evitar sentirme como un náufrago en un mar de lágrimas, buscando desesperadamente una orilla de amor correspondido.
Te amé como canción eterna, pero tú solo me viste como el último verso de un poema olvidado.
A veces me pregunto si el universo nos juntó solo para enseñarme cómo duele el amor no correspondido.
Me rompe el corazón saber que mis sentimientos por ti son tan intensos, mientras tú simplemente me ves como un amigo más. A veces duele más amarte en silencio que recibir un rechazo directo, pero seguiré guardando este amor no correspondido en mi pecho, esperando que algún día encuentres la manera de mirarme de la misma forma en que yo te miro a ti.
Me dejaste con el corazón hecho añicos, mientras yo te entregaba el mío envuelto en un lazo de ilusiones. Ahora me encuentro nadando en el océano de un amor no correspondido, atrapado en esta triste realidad donde tus caricias solo existen en mis sueños rotos.
Si tan solo supieras cuántas noches he pasado pensando en ti, soñando con un amor que nunca será. Mi corazón sigue latiendo por ti, pero sé que solo soy un espectador en tu película, un extra sin diálogo. Aunque duela, sigo guardando la esperanza de que algún día puedas verme como más que un amigo. Pero hasta entonces, me quedo aquí, escribiéndote frases de amor no correspondido que jamás leerás.
Me rompiste el corazón en mil pedazos y hoy, cada fragmento de mi ser te sigue amando en secreto, en esta triste historia de amor no correspondido.
Perdí el corazón en el laberinto de tus ojos, pero solo encontré espejos que reflejaban tu indiferencia, y ahora me pierdo en las lágrimas de un amor no correspondido.
Aunque mi corazón insista en amarte, sé que tú nunca serás capaz de corresponderme. No queda más que aceptar la triste realidad y seguir adelante, sabiendo que el amor no siempre obra milagros. Pero te llevaré siempre conmigo en las letras de mis poemas, donde por fin puedo expresar todo lo que siento sin temor a la decepción.
Me entregué con el corazón en la mano, pero tú solo lo miraste como si fuera un puñado de polvo. Dejaste que mis sentimientos se desvanecieran en el aire, mientras mis lágrimas se multiplicaban en ríos interminables. Ahora me queda el amargo sabor de un amor no correspondido, un dolor que se arrastra por mis venas y se aloja en cada esquina de mi alma destrozada.