Cuando te miro, mi corazón se llena de mariposas revoloteando en mi estómago y no puedo evitar sonreír como un idiota enamorado. Eres mi razón para ser cursi y mi excusa para escribir frases bobas, porque contigo el amor se vuelve poesía y cada día es una página en blanco para llenar de versos que solo tú y yo entendemos.