Aunque sé que nuestro amor es imposible, no puedo evitar soñar con un futuro donde nuestras almas se encuentren y se abracen sin miedo.
Soñarte y amarte en silencio es mi amor imposible, como ese café que nunca terminé de saborear pero siempre supe que me encantaba.
Sueño con tus besos, pero sé que son un imposible que mi corazón no quiere aceptar.
Cuando estoy contigo, mi corazón se acelera y mis pensamientos se desbordan, pero sé que nuestro amor es imposible, como el sol y la luna tratando de tocarse en el horizonte.
A veces, el amor es como una canción que suena en la radio pero nunca puedes encontrar en Spotify; simplemente está fuera de tu alcance, pero aún así te deja con ganas de bailar al ritmo de sus versos prohibidos.
Qué difícil es confesar que te amo cuando sé que nunca podré tenerte, pero prefiero amarte en silencio a perderte por completo.
Aunque sé que nuestro amor es un imposible, seguiré soñando contigo todas las noches, esperando que en algún universo paralelo nuestros destinos se encuentren y podamos ser más que simples amigos.
Eres como esa canción que siempre suena en mi cabeza, pero que nunca podré bailar contigo.
Desde el rincón de mi corazón, te escribo estas palabras que saben a imposible. Tu mirada es un abismo irresistible en el que me pierdo una y otra vez, pero sé que nuestro amor es como dos estrellas fugaces destinadas a no encontrarse. En esta historia prohibida, mis sueños chocan contra la realidad, pero nunca dejaré de soñar contigo, aunque sea desde la distancia.
Me pierdo en un mar de imposibilidades, navegando en tus ojos sabiendo que nunca podré atracar en tu corazón.
Todo el tiempo imagino cómo sería estar a tu lado, pero sé que nuestro amor es como un imposible inalcanzable. Aun así, sigo soñando contigo, esperando que algún día ese imposible se convierta en nuestro increíble destino.
Me enamoré de su sonrisa, de sus ojos que brillaban como estrellas en el cielo oscuro. Pero nuestro amor es como el imposible encuentro entre el sol y la luna, destinados a no coincidir en el mismo cielo, pero siempre anhelando ese instante mágico donde podamos fundirnos en un abrazo eterno.
En cada encuentro furtivo, en cada mirada cruzada, sé que nuestro amor es imposible pero mi corazón se aferra a la esperanza de que algún día el destino nos dé una oportunidad para ser más que un sueño robado.
Todas las noches, mi corazón lucha contra la realidad, deseando que algún día tus ojos vean más allá de la amistad y descubran el amor que junto a ti siempre he guardado en secreto.