Eres la única persona que logra que mi corazón lata a la velocidad de un motor dental, eres mi dulce anestesia y mi sonrisa más radiante.
Cuando sonríes, el mundo se ilumina y mis dientes se enamoran un poco más de ti. Eres mi dulce caries que deseo curar todos los días con besos y ternura.
Mi amor por ti es como un tratamiento dental, no importa cuánto tiempo pase, siempre estaré deseando verte para llenar mi corazón de sonrisas. Eres mi dentista del amor, el que me hace sentir mariposas en el estómago y me hace desear tener una cita dental a diario. Juntos, curaremos cualquier caries emocional y mantendremos nuestra relación tan pulida como una limpieza dental. Eres el dueño de mi corazón y mi dentista favorito.
Cuando me sonríes con esos dientes perfectos, mi corazón late más rápido que la velocidad de una turbina dental. Eres la razón por la cual amo ir al dentista.
Me dejas sin palabras, como un paciente después de una limpieza dental. Eres mi dentista del corazón, que cura todas mis caries emocionales y me deja con una sonrisa radiante. Te amo más que todos los dientes en mi boca, y eso es decir mucho.
Eres el dentista que ha curado mi sonrisa, pero también el dueño de mi corazón.
Cuando sonríes, mi corazón se convierte en un consultorio dental y mis emociones se convierten en caries de amor, porque eres la dentista que necesito para curar todas mis dolencias y llenar mi vida de sonrisas radiantes.
Eres mi dentista favorito, porque cuando sonrío, sé que detrás de mis dientes perfectos, hay un corazón que late solo por ti.
Me haces sonreír de oreja a oreja, y no solo por tu hermosa sonrisa, sino porque eres capaz de arreglar cada uno de mis dientes rotos. Eres mi dentista del amor, el único que ha logrado cautivar mi corazón y mi muela del juicio. Desde que entré en tu consultorio, supe que nuestra relación sería algo más que empastes y limpiezas. No hay nada más sexy que alguien que me cuide los dientes como tú lo haces, y mientras estás ahí, con tus manos hábiles y tu mirada llena de ternura, me siento agradecido de tener a alguien tan especial en mi boca y en mi vida. Eres la razón por la que sonrío sin miedo y estoy dispuesto a ir al dentista con una enorme sonrisa en el rostro ¡Te amo, mi dentista favorito!
Me encanta como tus manos expertas trabajan en mi boca, pero aún más cuando son esas mismas manos las que toman las mías y me hacen sentir que el cuidado de mi corazón está en buenas manos.
Cuando me sonríes, siento que mi corazón se convierte en un consultorio dental y tus besos, las herramientas perfectas para curar cualquier caries emocional.
Cuando me miras con esos ojos brillantes detrás de tu mascarilla, siento que me están curando el corazón sin necesidad de anestesia.
Cuando me miras con esos ojos brillantes mientras trabajas en mi boca, sé que encontré al dentista perfecto para mi corazón.
Cuando sonríes, mi corazón palpitante se convierte en un simple molar y no puedo evitar desear que seas mi dentista de por vida, porque en tus manos encuentro el remedio perfecto para todas mis caries emocionales.
Cuando sonríes, mis muelas del juicio se quedan sin palabras, dentista de mi corazón.
Eres mi dentista favorito, porque tus caricias con la sonda exploratoria son más dulces que cualquier caramelo y tus besos me dejan sin palabras… ¡y sin caries! Eres la razón por la que sonrío cada vez que entro a tu consultorio.
Eres mi dentista favorito, el que cuida de mi sonrisa y también de mi corazón.
Aunque las caries me hagan temblar, tú eres mi dentista favorito/a, porque cada vez que sonríes, iluminas mi mundo dental y me dejas sin palabras.
Me enamoré perdidamente de su sonrisa radiante y de cada curva perfecta de sus dientes, en ese momento supe que mi corazón había encontrado al dentista de mis sueños.