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Me enamoré de ti sin necesidad de verte, sin necesidad de tocarte. Mi amor por ti es ciego, pero siento tu esencia en cada latido de mi corazón. Eres la luz que ilumina mi oscuridad, la razón por la que sonrío sin razón aparente. No importa lo que digan o piensen, te amo a ciegas y eso es lo único que importa.
Me enamoré de su esencia, de sus imperfecciones, de cada pedacito de su ser. Mis ojos pueden estar cerrados, pero mi corazón ve más allá de lo evidente. En este amor ciego no hay barreras ni juicios, solo existe la certeza de que somos perfectos el uno para el otro.
Susurro tu nombre al viento, esperando que las letras dibujen mi amor en el aire. Mis ojos no te ven, pero mi corazón, cegado por tu esencia, te percibe en cada latido. Eres mi luz en la oscuridad, mi guía en este amor ciego que solo tú logras ver.
Me dejé guiar por el corazón, sin importar los obstáculos ni las advertencias. Ahora estoy ciego de amor, pero la oscuridad me hace ver con claridad lo mucho que te amo.
Me perdí en tus ojos, pero no necesito un mapa para encontrarte en mi corazón. Tu amor me ciega de una manera tan hermosa que, aún con los ojos abiertos, solo veo tu luz brillando en cada rincón de mi mundo. Eres el único paisaje que necesito contemplar para sentirme completo, porque en tu mirada encuentro toda la belleza y el amor que jamás podré ver con mis propios ojos.
Me sumerjo en tus ojos, sin necesidad de ver más allá. Tu mirada es mi universo, donde todo lo demás se desvanece y solo existes tú. En este amor ciego, mis sentimientos se guían por el latir de tu corazón y mi única certeza es que amarte es mi mayor verdad.
Me pierdo en el laberinto de sus ojos, donde la razón es cegada por el brillo de su mirada. Sin ver con los ojos físicos, veo con el corazón y me dejo llevar por el amor que emana de su ser.
Me perdí en tus ojos sin querer encontrar el camino de regreso, ahora mi amor es ciego y solo ve la belleza que emana de tu ser.
Me despierta la alegría de tenerte cerca, aunque el mundo se empeñe en decir que soy ciego en el amor, lo único que veo son tus ojos brillantes y llenos de amor.
Me entregué a su amor sin preguntar, con los ojos cerrados y el corazón abierto, sin importarme si era un riesgo o un acierto. Porque amar es confiar en lo desconocido, es dejarse llevar por el susurro de la pasión y creer que el destino nos guió hasta aquí. En este amor ciego no necesito ver, solo siento la certeza de que somos el uno para el otro, sin barreras ni prejuicios, solo nuestras almas entrelazadas en un abrazo eterno.
Me dejé llevar por el amor como un navegante sin brújula, sin importarme perderme en tus ojos oscuros y encontrarme en cada centímetro de tu piel.
Me enamoré de tus imperfecciones, de tus cicatrices invisibles y de tu amor ciego que me hace ver más allá de lo evidente. Eres mi luz en la oscuridad, mi guía en un mundo borroso donde solo importa sentir y entregarse sin mirar atrás. Te amaré con los ojos cerrados, confiando plenamente en el poder de nuestro amor, sin necesidad de ver para creer en cada latido de mi corazón que late solo por ti.
Cuando me miras con esos ojos en los que se refleja el infinito, no puedo evitar perderme en un amor tan ciego que no distingue razones ni barreras.