Éramos fuego ardiendo en la oscuridad, amantes prohibidos que se encontraban a escondidas en la encrucijada del deseo. Nuestro amor era un secreto preciado, una llama que nos consumía y nos llenaba de pasión prohibida. En cada roce furtivo, en cada mirada cómplice, sabíamos que estábamos jugando con fuego, pero ni el miedo ni la moral podían detenernos. Éramos dos almas unidas por un amor pasional y clandestino, dispuestas a arriesgarlo todo por esos momentos de ensueño que solo nosotros podíamos compartir. Aunque el mundo nos negara, nuestro amor se aferraba a la noche como una promesa robada, y juntos, vivíamos en esa deliciosa adrenalina de lo prohibido.
Si quieres puedes leer otras Frases sobre frases de amor de amantes prohibidos