Hoy aprendí que amarme a mí mismo no es un acto egoísta, sino una forma de llenar mi corazón y compartir ese amor desbordante con el mundo. Sin permitir que nadie apague mi luz, me prometo a mí mismo ser siempre mi propio refugio, mi mayor fanático y mi compañero de aventuras eterno. Porque si no me amo yo, ¿quién lo hará? Y si no me valoro yo, ¿cómo podré enseñarle al mundo a hacerlo?
Si quieres puedes leer otras Frases sobre sabias frases de amor propio