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Aunque las millas nos separen, mi corazón late fuerte por ti y tus recuerdos son como suspiros que me abrazan en la distancia. Te extraño, pero sé que este amor a kilómetros de distancia solo fortalece nuestros lazos y hace que nuestro reencuentro sea aún más dulce. Porque el amor verdadero no conoce fronteras ni límites geográficos, solo conoce el latir de dos corazones que se anhelan en cada amanecer y se sueñan en cada atardecer. Juntos o separados, siempre serás mi razón para sonreír, mi refugio en la melancolía y mi fuerza para seguir creyendo en nuestro amor a distancia.
Me duele tanto esta distancia que siento que mi corazón se ha convertido en una carta sin destino, esperando ser leída en algún rincón perdido del mundo.
Aunque la distancia se empeñe en separarnos físicamente, mi corazón se aferra a cada latido tuyo, creando un puente invisible de amor que nos une en cada suspiro triste de extrañarte.
Extraño cada centímetro de tu piel, cada susurro de tu voz y cada sonrisa que ilumina mis días. La distancia duele, pero el amor que siento por ti es más fuerte que cualquier kilómetro que nos separa. Aunque estemos lejos, nuestro amor se mantiene cerca en cada latido de mi corazón.
Extraño tus besos que se perdieron en la distancia, mis noches se vuelven más frías y mis días más grises sin tu calor. Pero aunque lejos estemos, nuestro amor es como un imán que nos une, resistiendo la distancia con cada latido del corazón.
Aunque las millas nos separen, mi corazón solo entiende una distancia: la que existe entre tú y yo. Y en cada latido triste, siento como ese vacío se hace más grande. Pero sé que el amor no entiende de kilómetros, así que desde aquí seguiré amándote a pesar de la lejanía, esperando el día en que podamos abrazarnos y acabar con esta tristeza interminable. Porque aunque nuestro amor sea a distancia, nuestra conexión es infinita.
Aunque la distancia nos separe físicamente, mi corazón siempre encuentra la forma de abrazarte a través de cada latido triste y solitario.
Dejé de contar los días y comencé a contar latidos, porque aunque estemos separados por kilómetros, mi corazón late más fuerte que nunca por ti.
A veces, la distancia se convierte en ese maldito obstáculo que nos separa físicamente, pero nunca podrá romper el vínculo de amor que nos une. Te extraño como loco y desearía poder abrazarte ahora mismo, pero mientras tanto, mi corazón viaja a tu lado a cada segundo. Esta distancia nos duele, pero nuestro amor es más fuerte y resistirá hasta que estemos juntos de nuevo.
Aunque la distancia nos separa físicamente, mi amor por ti no se desvanece, sigue creciendo con cada latido de mi corazón. Extraño cada momento juntos, cada beso robado y cada abrazo apretado, pero sé que nuestro amor superará cualquier obstáculo que se interponga en nuestro camino. No importa el espacio que nos separa, siempre serás mi razón para sonreír y lucharé cada día por mantener viva nuestra llama aunque sea a kilómetros de distancia.
Extraño tus abrazos y tus caricias, pero sé que nuestro amor a distancia es la prueba de que juntos podemos superar cualquier obstáculo. Aunque las lágrimas caigan, mi corazón sigue latiendo por ti, recordándome que nuestro amor triste es aún más fuerte y valiente.
Aunque la distancia nos separa físicamente, mi amor por ti trasciende fronteras y se desliza entre mil kilómetros para abrazarte en mis pensamientos. No importa cuán triste me sienta, siempre llevaré el consuelo de saber que nuestro amor es más fuerte que cualquier océano que nos separe.
Aunque las millas nos separen, mi amor por ti no tiene fronteras; cada suspiro anhela el día en que nuestros corazones vuelvan a encontrarse, mientras grabo en la memoria cada instante vivido, sabiendo que esta distancia solo fortalece nuestro vínculo y agudiza el deseo de volver a abrazarnos.
Aunque nuestros cuerpos están separados por kilómetros, mis pensamientos no pueden evitar abrazar tu ausencia y extrañarte cada segundo. La distancia duele, pero nuestro amor es tan fuerte que incluso el océano no puede apagarlo. Aunque estemos lejos, nuestras almas están unidas por un lazo indestructible que nos hace soportar esta triste realidad. Te espero con ansias, mi amor a distancia, porque sé que al final del camino nos encontraremos y la felicidad nos abrazará sin soltarnos jamás.
Aunque nuestras miradas no se crucen y nuestros cuerpos estén separados por kilómetros, mi amor por ti nunca deja de crecer. La distancia puede ser cruel, pero no puede apagar la llama que arde en mi corazón. Aunque me duela no poder tenerte cerca, te prometo que cada latido de mi corazón te llevará un poco más cerca de mí. ¡Te extraño más de lo que puedo expresar en palabras, pero nuestra conexión es más fuerte que cualquier obstáculo! Juntos, enfrentaremos la distancia y construiremos un amor que trascenderá los kilómetros.
Aunque las millas nos separen, mi corazón te abraza cada noche en susurros de ausencia, llenando los vacíos con la promesa de un reencuentro que borre estos kilómetros de tristeza.